Isaías dice: “El pueblo que caminaba en tinieblas vio una gran luz, sobre los que vivían en tierra de sombras, una luz resplandeció” (Is 9, 1-3) Sin duda alguna, el momento estelar en la Historia de la Humanidad, es el Nacimiento de Aquél que S. Lucas presenta como “Mesías, Salvador y Señor”. Su llegada a la tierra, está cuajada de dificultades e incomodidades. Soledad y la pobreza son la acogida de este mundo… Sin embargo, el recibimiento es luminoso por parte de Dios: una estrella muy luminosa apareció en el cielo; un Ángel se aparece a los pastores y les dice: “les anuncio una gran alegría para todo el pueblo.Hoy les ha nacido en la ciudad de David, el Salvador, el Mesías y Señor”. Y añade lucas que los Ángeles cantaban: Gloria a Dios en lo alto y en la tierra paz a los hombres amados por Él”
San Juan, por su parte nos dice que “la luz brilló en las tinieblas, pero las tinieblas no la recibieron”. Y es que son incompatibles como lo son el amor y el odio, el bien el mal, la vida y la muerte. Ya desde el pesebre, Jesús es portador de la luz y desde allí nos llama a la fraternidad, a la compasión por el hermano necesitado. El misterio de esta noche santa nos pide que nos convertirnos en portadores de luz, en estrellas de esperanza… Las tinieblas, a diferencia de la luz, son portadoras de ambiciones, se absurdos sueños de poder, de engaños y violencia que conducen irremediablemente a la lógica de la maldad, de la injusticia y de la muerte. No es más que el mandato del “desamor” como norma de vida, en contra del Mandamiento del Amor. (los anti Valores del Decálogo y del Mandamiento del Señor).
Navidad no es otra cosa que la cercanía de Dios. Desde el pesebre, nos llama a un nuevo Nacimiento. Su Hijo, su Verbo encarnado vino a vivir entre nosotros y recorrió nuestro mismo destino para enseñarnos el camino… Su palabra es clave para el tiempo que nos toca vivir…Desde su humilde nacimiento comenzó a experimentar “los gozos y las esperanzas, las tristezas y las angustias de los hombres y mujeres de todos los tiempos” (Gaudium et Spes 2). ¡Miremos su estrella, avivemos el fuego en nuestro corazón y salgamos de esta Eucaristía, a continuar la marcha como portadores de su luz!
CANTAREMOS:
- Hoy en la tierra ……………………………………………….. 426
- Señor ten piedad
- GLORIA ALELUYA, ha nacido el Salvador ……………… 229
- NANA …………………………………………………………….. 254
- Santo – Padre nuestro
- “Nació el Redentor, nació, nació
- para dar al mundo LA PAZ, la paz
- Paz y ventura, ventura y PAZ”
- Cordero de Dios
- EN UN PORTAL ………………………………………………… 238
- LA BUENA NUEVA
- NO SE NIÑO HERMOSO …………………………………….. 278