¡La atrayente sabiduría del Señor quedó plasmada en sus parábolas!…. En ellas supo evocar la presencia misteriosa del reino de Dios a partir de las sencillas experiencias vividas en su pequeña aldea de Nazaret y más tarde en Cafarnaún. En ellas palpita el reino de Dios…ese reino del que tanto habló y que nunca definió!…. Siempre decía: “el reino de Dios es como “….. De esta manera nos explica que el nuevo ser humano y la nueva sociedad, deberán vivir siempre bajo la convicción, de que el trigo y la cizaña estaremos siempre juntos….de que no hay manera posible se separar a los malos de los buenos, porque el mal es una realidad tangible que acompaña la historia de la salvación hasta el final de los tiempos. El mal no está atado a ningún lugar…se mueve libremente y hasta entra al templo de la misma manera que lo hacían los fariseos en época de Jesús. ¡La cizaña siempre crecerá camuflada junto al trigo y esa paciente Providencia de Dios no dejará de sorprendernos y es posible que hasta nos cause escándalo….
Pero hubo una parábola que se grabó en el corazón de aquellos campesinos, paisanos de Jesús. Él mismo saca la parábola de los recuerdos de su infancia, con el olor de pan caliente que llegaba todas las semanas a su camita la víspera del sábado. Muy temprano las mujeres se levantaban para amasar el pan. Preparaban la masa, introduciendo en ella un trozo de levadura para fermentarla, luego la cubrían con un paño y esperaban que la masa creciera. Mientras tanto calentaban la piedra en que se cocerían las hogazas. ¡El olor de aquellas hogazas preparadas amorosamente por sus madres era inconfundible, como inconfundible era el sentimiento que a él le sugería la cercanía del amor maternal de Dios, introduciendo en el mundo su levadura para sembrar su reino! Por eso dice: “El reino de los cielos se parece a la levadura: una mujer la toma, la mezcla con tres medidas de harina, hasta que todo lo fermenta”
¡Qué metáfora escoge Jesús!..¿Será verdad que la fuerza de Dios está de esa manera – escondida – en nuestra vida para fermentarla ?…. ¿Será posible que de esa misma manera, su levadura, esté secretamente penetrando en nuestra Venezuela para transformarla por entero?…. ¿Será posible que esté Dios actuando silenciosamente, mientras nosotros vamos y venimos esperanzados o angustiados?…. Nuestra vida es una opción de fe y no hay lugar para esquizofrenias: no nos es posible vivir divididos internamente. Sólo en Cristo es posible hallar la Vida y la Fuerza para formar parte del reino de Dios.
Julie Meucci
CANTAREMOS :
- El Señor nos llama y nos reúne …………………………………………. 272
- Señor ten piedad – Gloria
- Aleluya – Antífona
- Te vengo a ofrecer – Santo padre nuestro
- La Paz – Cordero de Dios – El Viñador
- Tan cerca de mi …………………………………………………………………. 193
- Alabaré ……………………………………………………………………………… 17