Mes: abril 2019

Cantaremos . Domingo de Ramos.

DOMINGO DE RAMOS

Ya se siente olor y se ve color de la primavera en Galilea. Las hojas de las higuera ya están despuntando y a Jesús le recuerdan la llegada inminente del reino de Dios. Era el mes de Nisán del año 30. (El mes de Nisán corresponde a marzo y abril de nuestro calendario). Pronto se celebraría la Pascua y entre los judíos que peregrinaban a Jerusalén crecía el entusiasmo. También Jesús quiso ir a Jerusalén acompañado de sus discípulos.  El llamado que Jesús hizo por dos largos años, (aproximadamente) en todas las aldeas de Galilea a entrar en el reino de Dios, estaba destinado a todos los hombres. Sería el momento ideal para anunciar, desde la ciudad  santa,  a todos los peregrinos venidos de todos los rincones del imperio, la irrupción del reino de Dios.

Los discípulos no se alegran, temen por la seguridad de su Maestro.  Su defensa de los empobrecidos y excluidos por el Sistema ha causado molestia en quienes disfrutan del poder, la opulencia y la abundancia.  Jesús no fue un fanático religioso, pero su libertad para exponer la experiencia interior de su relación amorosa con el Padre, el Dios a quien todos decían adorar, chocaba algunas veces con el amor a la Ley que era lo que se imponía entre muchos de los habitantes de Israel.

Llegar a Jerusalén y contemplar desde lejos el maravilloso templo, la cantidad de peregrinos que entraban por todos los caminos era impresionante. Muchos cantaban de emoción al pisar "la ciudad santa" y los discípulos se contagian. En el último tramo Jesús se ha montado en un burro. Los discípulos arrancan algunas ramas del camino mientras otros extienden su manto para que él pase.  "¡Hosanna al hijo de David!…"   

CANTAREMOS:

      • Que alegría cuando me dijeron ………………………………… 54
      • Shalom Hosanna …………………………………………………… 177
      • Ofertorio : Los frutos de la tierra
      • Comunión : Vaso Nuevos ………………………………………. 221
      •                   Tan Cerca de MI
      • Despedida : Alabaré

14 de Abril – Evangelio

Evangelio

Lc 22, 14–23, 56

Llegada la hora de cenar, se sentó Jesús con sus discípulos y les dijo: "Cuánto he deseado celebrar esta Pascua con ustedes, antes de padecer, porque yo les aseguro que ya no la volveré a celebrar, hasta que tenga cabal cumplimiento en el Reino de Dios". Luego tomó en sus manos una copa de vino, pronunció la acción de gracias y dijo: "Tomen esto y repártanlo entre ustedes, porque les aseguro que ya no volveré a beber del fruto de la vid hasta que venga el Reino de Dios".
Tomando después un pan, pronunció la acción de gracias, lo partió y se lo dio, diciendo: "Esto es mi cuerpo, que se entrega por ustedes. Hagan esto en memoria mía". Después de cenar, hizo lo mismo con una copa de vino, diciendo: "Esta copa es la nueva alianza, sellada con mi sangre, que se derrama por ustedes".
"Pero miren: la mano del que me va a entregar está conmigo en la mesa. Porque el Hijo del hombre va a morir, según lo decretado; pero ¡ay de aquel hombre por quien será entregado!" Ellos empezaron a preguntarse unos a otros quién de ellos podía ser el que lo iba a traicionar.
Después los discípulos se pusieron a discutir sobre cuál de ellos debería ser considerado como el más importante. Jesús les dijo: "Los reyes de los paganos los dominan, y los que ejercen la autoridad se hacen llamar bienhechores. Pero ustedes no hagan eso, sino todo lo contrario: que el mayor entre ustedes actúe como si fuera el menor, y el que gobierna, como si fuera un servidor. Porque, ¿quién vale más, el que está a la mesa o el que sirve? ¿Verdad que es el que está a la mesa? Pues yo estoy en medio de ustedes como el que sirve. Ustedes han perseverado conmigo en mis pruebas, y yo les voy a dar el Reino, como mi Padre me lo dio a mí, para que coman y beban a mi mesa en el Reino, y se siente cada uno en un trono, para juzgar a las doce tribus de Israel".
Luego añadió: "Simón, Simón, mira que Satanás ha pedido permiso para zarandearlos como trigo; pero yo he orado por ti, para que tu fe no desfallezca; y tú, una vez convertido, confirma a tus hermanos". Él le contestó: "Señor, estoy dispuesto a ir contigo incluso a la cárcel y a la muerte". Jesús le replicó: "Te digo, Pedro, que hoy, antes de que cante el gallo, habrás negado tres veces que me conoces".
Después les dijo a todos ellos: "Cuando los envié sin provisiones, sin dinero ni sandalias, ¿acaso les faltó algo?" Ellos contestaron: "Nada". Él añadió: "Ahora, en cambio, el que tenga dinero o provisiones, que los tome; y el que no tenga espada, que venda su manto y compre una. Les aseguro que conviene que se cumpla esto que está escrito de mí: Fue contado entre los malhechores, porque se acerca el cumplimiento de todo lo que se refiere a mí". Ellos le dijeron: "Señor, aquí hay dos espadas". Él les contestó: "¡Basta ya!"
Salió Jesús, como de costumbre, al monte de los Olivos y lo acompañaron los discípulos. Al llegar a ese sitio, les dijo: "Oren, para no caer en la tentación". Luego se alejó de ellos a la distancia de un tiro de piedra y se puso a orar de rodillas, diciendo: "Padre, si quieres, aparta de mí esta amarga prueba; pero que no se haga mi voluntad, sino la tuya". Se le apareció entonces un ángel para confortarlo; él, en su angustia mortal, oraba con mayor insistencia, y comenzó a sudar gruesas gotas de sangre, que caían hasta el suelo. Por fin terminó su oración, se levantó, fue hacia sus discípulos y los encontró dormidos por la pena. Entonces les dijo: "¿Por qué están dormidos? Levántense y oren para no caer en la tentación".

Leer más

Domingo de Ramos. “ De la pasión del Señor”

Domingo de Ramos
"De la pasión del Señor"
Leccionario: 37/38

Conmemoración de la entrada del Señor en Jerusalén
Procesión de las Palmas
37

Evangelio

Lc 19, 28-40

En aquel tiempo, Jesús, acompañado de sus discípulos, iba camino de Jerusalén, y al acercarse a Betfagé y a Betania, junto al monte llamado de los Olivos, envió a dos de sus discípulos, diciéndoles: "Vayan al caserío que está frente a ustedes. Al entrar, encontrarán atado un burrito que nadie ha montado todavía. Desátenlo y tráiganlo aquí. Si alguien les pregunta por qué lo desatan, díganle: ‘El Señor lo necesita’ ".

Fueron y encontraron todo como el Señor les había dicho. Mientras desataban el burro, los dueños les preguntaron: "¿Por qué lo desamarran?" Ellos contestaron: "El Señor lo necesita". Se llevaron, pues, el burro, le echaron encima los mantos e hicieron que Jesús montara en él.

Conforme iba avanzando, la gente tapizaba el camino con sus mantos, y cuando ya estaba cerca la bajada del monte de los Olivos, la multitud de discípulos, entusiasmados, se pusieron a alabar a Dios a gritos por todos los prodigios que habían visto, diciendo:
"¡Bendito el rey
que viene en nombre del Señor!

¡Paz en el cielo
y gloria en las alturas!"

Algunos fariseos que iban entre la gente, le dijeron: "Maestro, reprende a tus discípulos". Él les replicó: "Les aseguro que si ellos se callan, gritarán las piedras". 

La Misa

Cantaremos . V Domingo de Cuaresma/C

Todos necesitamos perdón.

Según su costumbre, Jesús ha pasado la noche a solas con su Padre querido en el Monte de los Olivos. Comienza el nuevo día, lleno del Espíritu de Dios que lo envía a "proclamar la liberación de los cautivos […] y dar libertad a los oprimidos”. Pronto se verá rodeado por un gentío que acude a la explanada del templo para escucharlo.
De pronto, un grupo de escribas y fariseos irrumpe trayendo a "una mujer sorprendida en adulterio". No les preocupa el destino terrible de la mujer. Nadie le interroga de nada. Está ya condenada. Los acusadores lo dejan muy claro: "En la Ley de Moisés se manda apedrear a las adúlteras. Tú, ¿qué dices?”
La situación es dramática: los fariseos están tensos, la mujer, angustiada; la gente, expectante. Jesús guarda un silencio sorprendente. Tiene ante sí a aquella mujer humillada, condenada por todos. Pronto será ejecutada. ¿Es esta la última palabra de Dios sobre esta hija suya?
Jesús, que está sentado, se inclina hacia el suelo y comienza a escribir algunos trazos en tierra. Seguramente busca luz. Los acusadores le piden una respuesta en nombre de la Ley. Él les responderá desde su experiencia de la misericordia de Dios: aquella mujer y sus acusadores, todos ellos, están necesitados del perdón de Dios.
Los acusadores sólo están pensando en el pecado de la mujer y en la condena de la Ley. Jesús cambiará la perspectiva. Pondrá a los acusadores ante su propio pecado. Ante Dios, todos han de reconocerse pecadores. Todos necesitamos su perdón.
Como le siguen insistiendo cada vez más, Jesús se incorpora y les dice: "Aquel de vosotros que no tenga pecado puede tirarle la primera piedra". ¿Quiénes sois vosotros para condenar a muerte a esa mujer, olvidando vuestros propios pecados y vuestra necesidad del perdón y de la misericordia de Dios?
Los acusadores se van retirando uno tras otro. Jesús apunta hacia una convivencia donde la pena de muerte no puede ser la última palabra sobre un ser humano. Más adelante, Jesús dirá solemnemente: "Yo no he venido para juzgar al mundo, sino para salvarlo".
El diálogo de Jesús con la mujer arroja nueva luz sobre su actuación. Los acusadores se han retirado, pero la mujer no se ha movido. Parece que necesita escuchar una última palabra de Jesús. No se siente todavía liberada. Jesús le dice "Tampoco yo te condeno. Vete y, en adelante no peques más".
Le ofrece su perdón, y, al mismo tiempo, le invita a no pecar más. El perdón de Dios no anula la responsabilidad, sino que exige conversión. Jesús sabe que "Dios no quiere la muerte del pecador, sino que se convierta y viva". (J.A.Pagola)

CANTAREMOS:

      • El Señor es mi fuerza ……………………………………… 80
      • Te ofrecemos Señor ………………………………………. 186
      • Por Ti Señor ………………………………………………….. 134
      • Al atardecer de la vida …………………………………….   3
      • Dame un nuevo corazón …………………………………. 64

7 abril – V Domingo de Cuaresma.Evangelio según san Juan /C

Evangelio según san Juan (Jn 8-1,11)

En aquel tiempo, Jesús se retiró al monte de los Olivos y al amanecer se presentó de nuevo en el templo, donde la multitud se le acercaba; y él, sentado entre ellos, les enseñaba.

Entonces los escribas y fariseos le llevaron a una mujer sorprendida en adulterio, y poniéndola frente a él, le dijeron: “Maestro, esta mujer ha sido sorprendida en flagrante adulterio. Moisés nos manda en la ley apedrear a estas mujeres. ¿Tú que dices?”

Le preguntaban esto para ponerle una trampa y poder acusarlo. Pero Jesús se agachó y se puso a escribir en el suelo con el dedo. Como insistían en su pregunta, se incorporó y les dijo: “Aquel de ustedes que no tenga pecado, que le tire la primera piedra”. Se volvió a agachar y siguió escribiendo en el suelo.

Al oír aquellas palabras, los acusadores comenzaron a escabullirse uno tras otro, empezando por los más viejos, hasta que dejaron solos a Jesús y a la mujer, que estaba de pie, junto a él.
Entonces Jesús se enderezó y le preguntó: “Mujer, ¿dónde están los que te acusaban? ¿Nadie te ha condenado?” Ella le contestó: “Nadie, Señor”. Y Jesús le dijo: “Tampoco yo te condeno. Vete y ya no vuelvas a pecar”.

Semana Santa 2019

PARROQUIA SAN ANDRÉS APÓSTOL
Capilla La Milagrosa, Calle Norte 1, Urb. El Placer, Caracas. Tel. 0212-9620031


Programa de Semana Santa 2019


Domingo, 14 de abril “Bendito el que viene en nombre del Señor (Lc 19,38)
12:00 m MISA DEL DOMINGO DE RAMOS
Con la bendición de las palmas
Lunes, 15 de Abril Seis días antes de la Pascua, fue Jesús a Betania” (Jn 12,1)
6:00 p.m. MISA DEL LUNES SANTO
Martes, 16 de abril “Yo les aseguro que uno de Ustedes me va a entregar”                      (Jn 13,21)”
6:00 p.m. MISA DEL MARTES SANTO
Miércoles, 17 de abril “Ofrecí la espada a los que me golpeaban” (ls 50,6)
6:00 p.m. MISA EN HONOR DEL NAZARENO
PROCESIÓN CON LA IMAGEN DEL NAZARENO
Jueves, 18 de abril “Este es mi cuerpo que se entrega por Ustedes” (1 Cor 11,24)
9:00 a.m. EN LA CATEDRAL DE CARACAS : MISA CRISMAL
6:00 p.m. MISA VESPERTINA DE LA CENA DEL SEÑOR
Con el lavatorio de los pies.
Hasta las 9:00 p.m. Adoración del Santísimo Sacramento reservado en el Monumento
Viernes, 19 de abril “Uno de los soldados le traspasó el costado con una lanza, e inmediatamente salió sangre y agua” (Jn 19,34)
Desde las 9:00 a.m. Adoración del Santísimo Sacramento reservado en el Monumento
4:00 p.m. LITURGIA DEL VIERNES SANTO
Con la adoración de la Santa Cruz
Sábado, 20 de abril “Yo sé que buscan a Jesús, el crucificado. No está aquí
ha resucitado (Lc 24, 5-6)
7:00 p.m. VIGILIA PASCUAL
Con la bendición del fuego, el pregón pascual, la bendición del agua y la renovación de las promesas bautismales
Domingo, 21 de abril “Hasta entonces no habían entendido las Escrituras, según las cuales Jesús debía resucitar de entre los muertos” (Jn 20,9)
12:00 m. MISA DEL DOMINGO DE RESURECCIÓN
Después de la Misa Actividad para los niños: búsqueda de los huevos de Pascua…