AQUÍ ENTRE NOS
* La repugnante acción de unos delincuentes que penetraron en la bella iglesia colonial de Nuestra Señora de la Begoña, en Naguanagua, ha sido un campanazo acerca de la desvalorización de la sociedad venezolana. Los profanadores no irrumpieron en el templo para robar valores materiales sino para llevarse más de 200 hostias consagradas que estaban dentro del Sagrario. Robaron lo que para nosotros los católicos es lo más sagrado: El cuerpo de Cristo. Extraoficialmente se dice que los investigadores están orientando sus pesquisas hacia grupos de santeros, paleros y brujos, que roban objetos sagrados para realizar sus horrendos actos de magia negra. Una comisión de la Iglesia valenciana, encabezada por Monseñor Roberto Sipols acudió a las autoridades eclesiásticas en Caracas no solo para informar de la repudiable acción sino para solicitar protección a los templos y casas parroquiales ante las autoridades nacionales.
*El mismo día que ocurrió la profanación en Valencia, la iglesia de San Antonio en Coro también sufrió la misma agresión. Pero lo peor es que casi al mismo tiempo que llegaba el Ministro del Interior, Justicia y Paz, Gral. Miguel Rodríguez Torres a una visita oficial a la Conferencia Episcopal, arribaba también una comisión del Cicpc para investigar el último de los OCHO robos que ha sufrido esa sede en los últimos dos meses. Así que las autoridades deben tomar muy en cuenta esta escalada contra iglesias y sitios pertenecientes a la Iglesia Católica, que pudiera responder a acciones hamponiles concertadas bajo una orden política.
* Por cierto que la Iglesia Católica venezolana está de fiesta, porque el Papa Francisco declaró “Venerable” a María Carmen Rendiles Martínez, religiosa de las Siervas de Jesús, que nació en Caracas en 1903 y murió en 1977. Tal título es el reconocimiento a sus “virtudes heroicas y compromiso con la Iglesia”, declaró Su Santidad. Con ella, ahora son seis los venezolanos que aguardan por la comprobación de sus milagros para ser elevados a los altares: El Dr. José Gregorio Hernández, y las religiosas María de San José, Candelaria de San José, Marcelina de San José y Emilia de San José. Y podría sumarse a esa lista el valenciano Monseñor Salvador Montes de Oca, quien ha sido calificado de “Obispo Mártir” por Monseñor Diego Padrón, presidente de la Conferencia Episcopal Venezolana, quien ha ofrecido retomar la causa ante la Santa Sede.
@charitorojas