El Salvador crucificado, ese es nuestro rey
Este relato majestuoso tiene muy poco de deshonor. Lucas no entiende la muerte de Jesús como un fracaso. Y no lo es en verdad. Es el momento supremo de la entrega a una causa por la que merece dar la vida. Cuando todos los que están al lado de la cruz le han retado a que salve tal como ellos entienden la salvación, Jesús se niega a aceptarlo. Cuando alguien, destrozado, aunque haya sido un bandido o malhechor, le ruega, le pide, le suplica, ofrece todo lo que es y todo lo que tiene.
Desde su impotencia de crucificado, pero de Señor verdadero, ofrece perdón, misericordia y salvación.
Esta teología de la cruz es la clave para entender adecuadamente a Jesucristo como Rey del universo. Es un rey sin poder, es decir, el “sin-poder” del amor, de la verdad y del evangelio como buena nueva para todos los que necesitan su ayuda. “Hoy estarás conmigo en el paraíso” es la afirmación más rotunda de lo que este rey crucificado ofrece de verdad. No es la conquista del mundo, sino de nuestra propia vida más allá de este mundo.
Fray Miguel de Burgos Núñez
Lector y Doctor en Teología. Licenciado en Sagrada Escritura
CANTAREMOS:
- Un pueblo que camina por el mundo ………………………….. 207
- Una espiga …………………………………………………………….. 265
- A Ti levanto mis ojos
- Señor Dios nuestro …………………………………………………. 169
- Tú reinarás ……………………………………………………………. 184