Autor: Julie Meucci

Organista de la Parroquia. Orientadora de charlas y cursos parroquiales.

Cantaremos – 5 de Febrero. V Domingo del Tiempo Ordinario /A

Continuamos en el Cap 5 de Mateo. El Evangelio está repleto de vivencias llenas de simbología, que solamente profundizando en ellas es como vamos comprendiendo las enseñanzas de Jesús. Por eso la Iglesia nos va llevando cada día, por medio de la liturgia, a través de los hechos y de la enseñanzas del Señor, para que meditando en su novedosa propuesta nos decidamos a dar respuesta a su llamado para formar parte del reino de Dios.

El reino de Dios, es Dios y su proyecto sobre la historia humana. Jesús lo sabe muy bien, por eso desde pequeño, observa cómo se desenvuelve la vida en la familia, en la aldea donde le tocó vivir. Cuando sea grande, al predicar, enseñará a partir de esas vivencias cotidianas que todos entienden. Desde niño observaba cuál era el lugar más apropiado para colocar el candil, de manera que su luz fuera bien aprovechada en la casa. Más tarde le dirá a sus seguidores: “Ustedes son la luz”…y les recuerda que la luz se enciende para ponerla encima del candelero de manera que ilumine… La luz es la fe, el amor y la vida de cara a la verdad. Las tinieblas son la incredulidad, la cerrazón ante el bien y el Amor.

Explica además: “Si la sal se desvirtúa, ¿con qué se salará?…. En nuestro país, azotado por la escasez, la sal es el producto más barato y cuesta poco. Hoy tenemos refrigeradores, pero en tiempo de Jesús no, y la sal era necesaria para conservar los alimentos. Por eso al pedirnos que seamos Sal, nos está diciendo que debemos ser conservantes para que el mundo no se pudra en la corrupción y en los vicios. Vivimos en la carne, pero no debemos vivir según la carne. Vivimos en la tierra pero estamos llamados a ser ciudadanos del cielo.

CANTAREMOS:

      • El Señor nos llama y nos reúne ……………………………………… 272
        • Señor ten piedad- Gloria
        • Aleluya – Antífona
      • Este pan y vino Señor ……………………………………………………  91
        • Santo – Padre nuestro
        • La Paz – Cordero de Dios
      • Señor, tu eres nuestra luz ……………………………………………… 171
      • Señor Dios nuestro ………………………………………………………. 169
      • Alabaré ………………………………………………………………………..  17

Cantaremos – 29 de Enero . IV Domingo del Tiempo Ordinario /A

En el Sermón de la Montaña, Cristo desborda su corazón revelándonos los misterios del Reino. Nos comunica una chispa de la sabiduría de Dios y nos da la clave de la felicidad. Sólo que con nuestra mentalidad todo lo queremos al instante, de todo pretendemos la respuesta inmediata, todo debe producirnos ganancia, placer y éxito inmediato. Queremos los frutos sin el trabajo de la siembra y de la cosecha. Sin embargo, en la montaña, Jesús nos habla de manera diferente. Nos dice que luchemos hoy para triunfar mañana…que nos neguemos hoy para recibir los frutos después.

Allí Jesús va perfeccionando mandamiento por mandamiento, pues si la Ley de Moisés trataba de hacer bueno al hombre, el Señor quiere algo más: nos pide ser perfectos como su Padre Celestial es perfecto. Estas enseñanzas de Jesús, son algo más que un simple código de ética. Expresan más bien una manera de ser, y la conciencia de esta manera de ser, estalla en las Bienaventuranzas. El Señor nos trazó un programa de vida proponiéndonos una fortaleza que sólo con su gracia es posible. Desde la Montaña nos dejó en claro que el reino de los cielos no se consigue por palancas e influencias…cada uno debe trabajar y ganarse su cosecha.

CANTAREMOS:

      • Vienen con alegría ……………………………………….. 219
        • Señor ten piedad – Gloria
        • Aleluya – Antífona
      • Este es el momento ……………………………………..   73
        • Santo – Padre nuestro
        • La Paz – Cordero de Dios
      • Otras bienaventuranzas ……………………………….   126
      • Al atardecer de la vida …………………………………      3
      • Si me falta el amor ………………………………………  178

Cantaremos – Bautizo del Señor

Antes de comenzar su vida pública, Jesús tiene una experiencia maravillosa que trasformará radicalmente su vida. En el momento en que él humildemente se somete al bautismo predicado por Juan, Jesús experimenta de manera especialísima la Paternidad divina de  Dios, y se siente plenamente habitado por su Espíritu divino. Inmerso en el Misterio Trinitario, Jesús se dispone a anunciar con su vida y su mensaje  la Buena Noticia de Salvación.  ¡Es Dios mismo quien viene a salvar al hombre!

Esa fuerza del Espíritu continúa viva en la Iglesia, en medio de un mundo convulso y desorientado por la pluralidad  de ideas y de doctrinas que no siempre siempre son afines al reino de Dios proclamado por Jesús. El Señor nos dejó su mensaje bien definido, nos habló de las dificultades que encontraremos y nos dio las señales para identificarlo. Sólo caminando a la luz de su Evangelio la Iglesia podrá permanecer como luz sobre el candelero, como sal que da sabor y como levadura que fermenta.

La buena Noticia, el Evangelio de Jesús, es una maravillosa Novedad para todos.  Y lo será siempre y cuando no perdamos de vista la luz del Espíritu que el Señor prometió a sus seguidores. Al comienzo de un nuevo año, continuemos la marcha por los caminos evangelizadores de un Canto litúrgico que llega a todos como mensaje pero que toca los corazones para moverlos a una respuesta de una vida más cristiana y siempre renovada por la acción del Espíritu.

Julie Meucci

 

CANTAREMOS:

      • El Señor es mi fuerza ………………………………………….  80
        • Señor ten piedad – Gloria
        • Aleluya – Antífona
      • Te vengo a ofrecer
        • Santo – Padre nuestro
        • La Paz – Cordero de Dios
      • Señor tu eres nuestra luz …………………………………… 171
      • Por Tí Señor ………………………………………………………… 134
      • Alabaré ………………………………………………………………. 117

8 de Enero – Cantaremos . Epifanía del Señor

El relato de los magos ha sido visto por los Padres de la Iglesia como ejemplo de unos hombres que, aun viviendo en las tinieblas del paganismo, han sido capaces de responder fielmente a la luz que los llamaba a la fe. Son hombres que, con su actuación, nos invitan a escuchar toda llamada que nos urge a caminar de manera fiel hacia Cristo.
Nuestra vida transcurre con frecuencia en la corteza de la existencia. Trabajos, contactos, problemas, encuentros, ocupaciones diversas, nos llevan y traen, y la vida se nos va pasando llenando cada instante con algo que hemos de hacer, decir, ver o planear.

Corremos así el riesgo de perder nuestra propia identidad, convertirnos en una cosa más entre otras y vivir sin saber ya en qué dirección caminar. ¿Hay una luz capaz de orientar nuestra existencia? ¿Hay una respuesta a nuestros anhelos y aspiraciones más profundas? Desde la fe cristiana, esa respuesta existe. Esa luz brilla ya en ese Niño nacido en Belén.
Lo importante es tomar conciencia de que vivimos en tinieblas, de que hemos perdido el sentido fundamental de la vida. Quien reconoce esto no se encuentra lejos de iniciar la búsqueda del camino acertado.  Ojalá en medio de nuestro vivir diario no perdamos nunca la capacidad de estar abiertos a toda luz que pueda iluminar nuestra existencia, a toda llamada que pueda dar profundidad a nuestra vida.

CANTAREMOS :

      • Dios camina con su pueblo ……………………………… 239
        • Señor ten piedad – Gloria
        • Aleluya
      • Amanecerá el Señor
      • Oh luz de Dios ………………………………………………. 267
        • Santo – Padre nuestro
        • La paz Cordero de Dios
      • Oh Emmanuel ………………………………………………. 266
        • La Buena Nueva
      • Corre Caballito …………………………………………….. 232

Cantaremos – 24 de Diciembre, Feria, IV Semana de Adviento

image_pesebreIsaías dice: “El pueblo que caminaba en tinieblas vio una gran luz, sobre los que vivían en tierra de sombras, una luz resplandeció” (Is 9, 1-3)  Sin duda alguna, el momento estelar en la Historia de la Humanidad, es el Nacimiento de Aquél que S. Lucas presenta como “Mesías, Salvador y Señor”. Su llegada a la tierra, está cuajada de dificultades e incomodidades. Soledad y la pobreza son la acogida de este mundo… Sin embargo, el recibimiento es luminoso por parte de Dios: una estrella muy luminosa apareció en el cielo; un Ángel se aparece a los pastores y les dice: “les anuncio una gran alegría para todo el pueblo.Hoy les ha nacido en la ciudad de David, el Salvador, el Mesías y Señor”. Y añade lucas que los Ángeles cantaban: Gloria a Dios en lo alto y en la tierra paz a los hombres amados por Él”


San Juan, por su parte nos dice que  “la luz brilló en las tinieblas, pero las tinieblas no la recibieron”. Y es que son incompatibles como lo son el amor y el odio, el bien el mal, la vida y la muerte. Ya desde el pesebre, Jesús es portador de la luz y desde allí nos llama a la fraternidad, a la compasión por el hermano necesitado. El misterio de esta noche santa nos pide que nos convertirnos en portadores de luz, en estrellas de esperanza… Las tinieblas, a diferencia de la luz, son portadoras de ambiciones, se absurdos sueños de poder, de engaños y violencia que conducen irremediablemente a la lógica de la maldad, de la injusticia y de la muerte. No es más que el mandato del “desamor” como norma de vida, en contra del Mandamiento del Amor. (los anti Valores del Decálogo  y del Mandamiento del Señor).

Navidad no es otra cosa que la cercanía de Dios. Desde el pesebre, nos llama a un nuevo Nacimiento.  Su Hijo, su Verbo encarnado vino a vivir entre nosotros y recorrió nuestro mismo destino para enseñarnos el camino… Su palabra es clave para el tiempo que nos toca vivir…Desde su humilde nacimiento comenzó a experimentar “los gozos y las esperanzas, las tristezas y las angustias de los hombres y mujeres de todos los tiempos” (Gaudium et Spes 2). ¡Miremos su estrella, avivemos el fuego en nuestro corazón y salgamos de esta Eucaristía, a continuar la marcha como portadores de su luz!

 

CANTAREMOS:

      • Hoy en la tierra ……………………………………………….. 426
        • Señor ten piedad
      • GLORIA ALELUYA, ha nacido el Salvador ……………… 229
      • NANA …………………………………………………………….. 254
        • Santo – Padre nuestro
          • “Nació el Redentor, nació, nació
          • para dar al mundo LA PAZ, la paz
          • Paz y ventura, ventura y PAZ”
        • Cordero de Dios
      • EN UN PORTAL ………………………………………………… 238
        • LA BUENA NUEVA
      • NO SE NIÑO HERMOSO …………………………………….. 278

Cantaremos. XXXII Domingo del Tiempo Ordinario /C

Hemos sido creados para la vida, no para la muerte.

Es verdad que sobre la otra vida, sobre la resurrección, debemos aprender muchas cosas y, sobre todo, debemos “repensar” con radicalidad este gran misterio de la vida cristiana. No podemos hacer afirmaciones y proclamar tópicos como si nada hubiera cambiado en la teología y en la cultura actual. Jesús, en su enfrentamiento con los saduceos, no solamente se permite desmontarles su ideología cerrada y tradicional, materialista y “atea” en cierta forma. También corrige la mentalidad de los fariseos que pensaban que en la otra vida todo debía ser como en ésta o algo parecido. Debemos estar abiertos a no especular con que la resurrección tiene que ocurrir al final de los tiempos y a que se junten las cenizas de millones y millones de seres. Debemos estar abiertos que creer en la resurrección como un don de Dios, como un regalo, como el final de su obra creadora en nosotros, no después de toda una eternidad, de años sin sentido, sino en el mismo momento de la muerte. Y debemos estar abiertos a “repensar”, como Jesús nos enseña en este episodio, que nuestra vida debe ser muy distinta a ésta que tanto nos seduce, aunque seamos las mismas personas, nosotros mismos, los que hemos de ser resucitados y no otros. Debemos, a su vez, “repensar” cómo debemos relacionarnos con nuestros seres queridos que ya no están con nosotros y hacer del cristianismo una religión coherente con la posibilidad de una vida después de la muerte. Y esto, desde luego, no habrá teoría científica que lo pueda explicar. Será la fe, precisamente la fe, lo que le faltaba a los saduceos, el gran reto a nuestra cultura y a nuestra mentalidad deshumanizada. No seremos, de verdad, lo que debemos de ser hasta que no sepamos pasar por la muerte como el verdadero nacimiento. Si negamos la resurrección, negamos a nuestro Dios, al Dios de Jesús que es un Dios de vivos y que da la vida verdadera en la verdadera muerte.

Fray Miguel de Burgos Núñez
Lector y Doctor en Teología. Licenciado en Sagrada Escritura

CANTAREMOS:

      • Vienen con alegría ………………………………..    
      • Una espiga …………………………………………..205   
      • Pescador de hombres ………………………….…128  
      • Viva Cristo ………………………………………….. 218

Cantaremos–XXX Domingo del Tiempo Ordinario /C

Lo que para Lucas proclama Jesús delante de los que le escuchan es tan revolucionario que necesariamente debía llevarle a la muerte y, sin embargo, hasta un niño estaría de parte de Jesús, porque no es razonable que el fariseo “excomulgue” a su compañero de plegaria. Pero la ceguera religiosa es a veces tan dura, que lo bueno es siempre malo para algunos y lo malo es siempre bueno. Lo bueno es lo que ellos hacen; lo malo lo que hacen los otros. ¿Por qué? Porque la religión del fariseo se fundamenta en una seguridad viciada y se hace monólogo de uno mismo. Es una patología subjetiva envuelta en el celofán de lo religioso desde donde ve a Dios y a los otros como uno quiere verlos y no como son en verdad. En realidad solamente se está viendo a sí mismo. Esto es más frecuente de lo que pensamos. Por el contrario, el publicano tendrá un verdadero diálogo con Dios, un diálogo personal donde descubre su “necesidad” perentoria y donde Dios se deja descubrir desde lo mejor que ofrece al hombre. El fariseo, claramente, le está pasando factura a Dios. Esto es patente y esa es la razón de su religiosidad. El publicano, por el contrario, pide humildemente a Dios su factura para pagarla. El fariseo no quiere pagar factura porque considera que ya lo ha hecho con los “diezmos y primicias” y ayunos, precisamente lo que Dios no tiene en cuenta o no necesita. Eso se han inventado como sucedáneo de la verdadera religiosidad del corazón.

El fariseo, en vez de confrontarse con Dios y con él mismo, se confronta con el pecador; aquí hay un su vicio religioso radical. El pecador que está al fondo y no se atreve a levantar sus ojos, se confronta con Dios y consigo mismo y ahí está la explicación de por qué Jesús está más cerca de él que del fariseo. El pecador ha sabido entender a Dios como misericordia y como bondad. El fariseo, por el contrario, nunca ha entendido a Dios humana y rectamente. Éste extrae de su propia justicia la razón de su salvación y de su felicidad; el publicano solamente se fía del amor y de la misericordia de Dios. El fariseo, que no sabe encontrar a Dios, tampoco sabe encontrar a su prójimo porque nunca cambiará en sus juicios negativos sobre él. El publicano, por el contrario, no tiene nada contra el que se considera justo, porque ha encontrado en Dios muchas razones para pensar bien de todos. El fariseo ha hecho del vicio virtud; el publicano ha hecho de la religión una necesidad de curación verdadera. Solamente dice una oración, en muy pocas palabras: “ten piedad de mí porque soy un pecador”. La retahíla de cosas que el fariseo pronuncia en su plegaria han dejado su oración en un vacío y son el reflejo de una religión que no une con Dios.

Fray Miguel de Burgos Núñez
Lector y Doctor en Teología. Licenciado en Sagrada Escritura

CANTAREMOS:

      • Reunidos en nombre del Señor ……………………………….. 159
        • Ten piedad – Gloria
        • Aleluya – Antífona
      • Los frutos de la tierra………………………………………………     
        • Santo – Padre nuestro
        • Dame la Paz hermano – Cordero de Dios
      • Vaso nuevo …….……………………………………………………. 221
      • Por Ti Señor ………………………………………………………… 134
      • Viva Cristo …………………………………………………………… 218

Cantaremos – XXIX Domingo del Tiempo Ordinario/C

El evangelio de este domingo nos hace escuchar el grito de todos los que piden justicia. La viuda, símbolo del desamparo y la impotencia, representa hoy a tantas víctimas sepultadas en las cárceles, abandonadas al autoritarismo totalitario del Poder, a la carencia absoluta de moral de los jueces y a la violencia de sus carceleros.

Bíblicamente, la viuda es símbolo de la persona desamparada. Está sola, no tiene quien la ayude ni quien la defienda. Su súplica es la de todos los pobres y oprimidos…. como la de tantos de los que abundan en nuestra tierra y deambulan por nuestras calles….. Por otra parte, al juez sin principios ni religión no le importa para nada el sufrimiento de las víctimas ni el de su familia. Su interés está centrado en la jugosa remuneración material que recibe. Sólo piensa en enriquecerse más.

Para muchos de los que habitan este planeta, la vida es una larga noche en el más oscuro calabozo. El mensaje de Jesucristo resucitado de una muerte injusta, es la mejor señal de la victoria del bien sobre el mal. Lamentablemente, mientras tanto, los humanos esperamos impacientes ante el silencio de Dios….y escuchamos por todos lados frases llenas de desilusión. Tal vez nuestra oración es cómoda y equivocada: pedimos a Dios que intervenga y haga lo que nos toca a nosotros: trabajar para construir un mundo más justo y solidario, no a punta de limosnas populistas, sino entregando a los hermanos las herramientas para construirse una vida digna que tenga su continuidad en una eternidad feliz. Hemos de comenzar por repartir Valores, no paupérrimos valores.

CANTAREMOS:

      • Que alegría cuando me dijeron ………………………………….. 141
      • Te vengo a ofrecer
      • Con nosotros está …………………………………………………….  45
      • Tan cerca de mi ……………………………………………………… 193
      • Viva Cristo …………………………………………………………….. 218

Cantaremos – XXVII Domingo del Tiempo Ordinario /C

Jesús es realmente sorprendente.. viene a este mundo para enseñarnos al Padre, para mostrarnos cómo es realmente Dios. Nadie lo pudo hacer antes, ni lo hará después mejor que él. Llama a un grupo de hombres para entrenarlos y entregarles la misión de continuar su obra. Aquellos hombres, no son ciertamente, ni por preparación, ni por talento lo más destacado de este mundo. Cualquiera de nosotros que intente decir lo contrario, estaría haciéndole un flaco favor a la incomparable labor que hizo el Señor con tan pobre materia prima.

Aquellos hombres, limitados en las categorías humanas, amaban al Señor.  Tal vez no le comprendieron en vida, y su muerte los dejó más desorientados y aturdidos de lo que podemos imaginar. Pero cuando Jesús hablaba, cuando enseñaba – ¡todo en su vida era una enseñanza!-  ellos le contemplaban, le admiraban y a un cierto momento, ante el reto que se les plantea, le hacen al Maestro una petición: “Señor, auméntanos la fe”. Se dan cuenta que su fe es débil, demasiado pequeña para lo que ya en cierta manera intuían como una misión  superior a su capacidad y a sus fuerzas.

Han pasado poco más de veinte siglos, y su iglesia tiene una abultada historia de encuentros y desencuentros, de entregas y traiciones, de luces y tinieblas…. La Iglesia cuenta con historia de vidas hermosas y edificantes, con hombres y mujeres de recia virtud, pero no está ausente la lastimosa miseria humana. En una empresa de dimensiones eternas contamos con el terrible límite de lo humano… Caminar al ritmo de Jesús no es nada fácil.. y tenemos que aprender el difícil arte de caminar a su lado, el arte silencioso de la escucha de su palabra que a veces retumba inquietante y otras se pierde en el silencio de la soledad interior.  ¡Tenemos que aprender a vivir una vida más evangélica y menos atada a los cálculos humanos, el amor del discípulo y la pasión por la misión del apóstol!  Necesitamos una Fe contagiosa,  porque nuestro mundo está seco y nuestras comunidades necesitan su gracia para contagiar la luz de su evangelio y creer en la verdad de sus promesas.

CANTAREMOS:

      • Que alegría cuando me dijeron ………………………………… 141
        • Señor ten piedad – Gloria
        • Aleluya – Antífona
      • Te vengo a ofrecer …………………………………………………     
        • Santo – Padre nuestro
        • La Paz – Cordero de Dios
      • Pescador de hombres …………………………………………….     
      • Tan cerca de mi ……………………………………………………. 193
      • Viva Cristo ……………………………………………………………  218