Categoría: Comunidad

Comunidades activas en la Parroquia

Natividad del Señor . Juan (1,1-18): La Palabra humana de Dios

1. El evangelio es el prólogo del evangelio de Juan (1,1-18), una de las páginas más gloriosas, profundas y teológicas que se hayan escrito para decir algo de lo que es Dios, de lo que es Jesucristo, y de lo que es el hecho de la encarnación, en esa expresión inaudita de el “Verbo se hizo carne y habitó entre nosotros”. La encarnación se expresa mediante lo más profundo que Dios tiene: su Palabra; con ella crea todas las cosas, como se pone de manifiesto en el relato de la creación de Génesis 1; con ella llama, como le sucede a Abrahán, el padre de los creyentes; con ella libera al pueblo de la esclavitud de Egipto; con ella anuncia los tiempos nuevos, como ocurre en las palabras de los profetas auténticos de Israel; con ella salva, como acontece con Jesucristo que nos revela el amor de este Dios. El evangelio de Juan, pues, no dispone de una tradición como la de Lucas para hablarnos de la anunciación y del nacimiento de Jesús, pero ha podido introducirse teológicamente en esos misterios mediante su teología de la Palabra. También, en nosotros, es muy importante la palabra, como en Dios. Con ella podemos crear situaciones nuevas de fraternidad; con nuestra palabra podemos dar vida a quien esté en la muerte del abandono y la ignominia, o muerte a quien esté buscando algo nuevo mediante compromisos de amor y justicia. Jesús, pues, también se ha encarnado para hacer nuestra palabra (que expresa nuestros sentimientos y pensamientos, nuestro yo más profundo, lo que sale del corazón) una palabra de luz y de misericordia; de perdón y de acogida. El ha puesto su tienda entre nosotros… para ser nuestro confidente de Dios.

2. Un prólogo se escribe normalmente cuando la obra ya está completa; de esta manera, en el prólogo se expresan las ideas fundamentales de la obra que viene a continuación. Supongamos esto para el prólogo del cuarto evangelio. Puede parecer que tiene una cierta unidad, pero suprimid los vv. 6. 7. 8 y 15 que tratan de Juan Bautista y que fueron añadidos posteriormente. La razón es que hubo algunos discípulos que se mantuvieron fieles a Juan el Bautista y le otorgaban cierta preponderancia sobre Jesús. Era una secta baptista que tuvo cierta fuerza, sobre todo en el s. II (d.C.). De esta manera tendremos un prólogo lleno de fuerza y de lógica.

A) DIOS Y EL VERBO (vv. 1-5): Es la primera enseñanza de este himno. Quizás el prólogo nació en la celebración del culto. Sería como una especie de credo de la comunidad en la que vive Juan. Dios y su Palabra. Verbo = PALABRA. Esta expresión de Logos no tiene sus raíces en la filosofía griega, sino que es eminentemente bíblica. En la Biblia, en el AT, se dice que las divinidades paganas no hablan: *tienen boca, pero no hablan” (Salmo 115, 5). El Dios de la Biblia es el único que habla, que se expresa en el mundos. No está todavía personificada esta Palabra, pero se nota que Dios da vida al mundo por su PALABRA. Posteriormente, en una imagen semejante, casi se personifica esta fuerza de Dios bajo el nombre de SABIDURÍA. La Sabiduría es la que ha creado *con” Dios todas las cosas (Cf. Prov 3,19ss; 8, 22-31; 14,31;17,5). De todas formas, ni la Palabra, ni la SABIDURÍA se identifican plenamente con Dios en el AT. ¿Cuál es la novedad de Juan? Pues que la identifica con Dios, “estaba en Dios”. La personaliza. No es solamente una comparación, sino que la PALABRA (El Verbo o el Logos) es Dios mismo. Hay una relación entre Dios y la Palabra. Dios no está cerrado en Él mismo, sino que se pluraliza. Es una riqueza de Dios. Y, además, esta Palabra es creadora, como en el AT. Vemos que la fuente de inspiración de Juan es el AT y no la filosofía griega (v.3). La Palabra es la riqueza de Dios y del mundo (vv. 4 y 5). Es la vida y la vida es la luz de los hombres. Luego la Palabra de Dios es la fuente del mundo, toda la vida procede de Él y esa vida es la luz que los hombres han perdido. En este primer asomo al misterio de Dios en el himno de Juan, se revela una cosa fundamental. Es una idea revolucionaria para los judíos, que solamente eran monoteístas. Dios es más rico todavía. Dios es una pluralidad en la unidad. La Palabra es ALGUIEN esencial es Dios y para el mundo.

B) SOBRE LA ENCARNACIÓN (vv. 9.10.11.14 y 18): En estos versos se encierra todo el evangelio de Juan: la teología de la Encarnación. ¿Qué es esto? Es la reflexión que Juan ha hecho sobre Cristo. Se parte de un principio: Cristo-Jesús es la Palabra de Dios. Dios no se ha quedado en el cielo, sino que se ha hecho hombre y ha venido al mundo. Nosotros creemos en el Dios más humano que se ha podido imaginar en toda la historia de la religiones. La Palabra ha venido a “lo suyo”, a lo que había creado. Pero lo suyo no la ha recibido. Este es el drama de la Encarnación: la lucha entre la luz y las tinieblas que recorre todo el cuarto evangelio. El v. 14 tiene una enseñanza que puede rezar así: La palabra no solamente se ha hecho carne, “sarx”, debilidad, sino que se ha introducido en el misterio del pecado del mundo. Este es el sentido exacto y radicalmente fuerte. Se ha encarnado y ha tomado nuestros pecados. Es la idea más bella y original de nuestro misterio cristiano. Para un griego era impensable, ya que despreciaban el cuerpo. Lo mismo que para un judío, que no concebía que Dios se pudiera llegar a la impureza de los hombres. (Qué misterio y qué fuerza!. Y lo curioso es que, en la carne, los hombres que lo han acogido han podido ver la gloria de Dios. La gloria (kabod) era para los judíos como el poder de Dios. En el AT los judíos tenían que taparse la cara para no ver el resplandor de la gloria de Dios (v.g. en el Sinaí; o el profeta Isaías en el momento de su vocación). El v. 18 nos explica más: Dios se ha revelado por el Hijo y el Hijo es la Palabra, porque a Dios nadie lo ha visto jamás. Aunque esto es judío, se da un paso, porque nosotros lo podemos conocer por Jesús, que es el Hijo. Nosotros sólo podemos conocer a Dios por Jesús que nos lo ha revelado, ya que Jesús es el Hijo y el Hijo es la Palabra y la Palabra estaba desde el principio en Dios y Él mismo es Dios. Desde ahora, los cristianos hemos de saber que, para conocer a Dios, primero hemos de conocer a Jesús: cómo vive y cómo actúa. Ser cristiano es reconocer, en el acontecimiento histórico de Jesús, en este hombre de nuestra carne, tan próximo, tan fraternal, el rostro, la Palabra y la gloria de Dios: *quien me ha visto a mi ha visto al Padre”

C) SOBRE LA FE: (vv. 12.13.16.17): Todo esto que hemos expuesto no puede ser entendido sino por la fe. Deberíamos dejar el prólogo para el final del año litúrgico, porque después de conocer a Jesús y haber escuchado su palabra, nosotros nos decidimos por Él y creemos en Dios. Pero se ha de asumir el riesgo de la fe y aceptar así a Jesús y a Dios, de primeras. También porque, a pesar de todo, la fe es un don de Dios y debemos pedirle a Él que nos la dé y nos la fortalezca. Pero la fe en estos versos no se nos presenta en forma de creencia en verdades, sino en forma de vida: porque nos hace hijos de Dios. Es un tema que recorre todo el Evangelio de Juan.Natividad del Señor .

Fray Miguel de Burgos Núñez
Maestro y Doctor en Teología. Licenciado en Sagrada Escritura

Misas de Aguinaldos 2017

Parroquia San Andrés Apóstol

Programa de misas de Navidad y Año nuevo 2018>

Misas de Aguinaldos

 

Viernes, 15 de Diciembre
6:00 p.m
Calle Loma Larga, Qta Cala de Agua, Urb. Los Guayabitos
Sábado, 16 de Diciembre
6:00 p.m
MISA DEL IV DOMINGO DE ADVIENTO
Domingo, 17 Diciembre
12:00 m.
Capilla La Milagrosa
MISA DEL IV DOMINGO DE ADVIENTO
Lunes, 18 de Diciembre
5:00 p.m.
Calle Sur 3, Qta Alborada, Urb. El Placer
Martes, 19 de Diciembre
5:00 p.m.
Calle Sur 3. Qta Piluquita, Urb. El Placer
Miércoles, 20 de Diciembre
5:00 p.m.
Calle Sur 6, Qta Lejanía, Urb. El Placer
Jueves, 21 de Diciembre
5:00 p.m.
Calle Sta. Isabel con Calle San Antonio Qta. Punto Alto 14
Urb. Monte Elena
Viernes, 22 de Diciembre
5:00 p.m
Casa San Enrique de Ossó, Urb. Villa Laura
Sábado, 23 de Diciembre
6
:00 p.m
Capilla La Milagrosa
MISA DEL IV DOMINGO DE ADVIENTO
Domingo, 24 Diciembre
12
:00 m
Capilla La Milagrosa
MISA DEL IV DOMINGO DE ADVIENTO

Misas de Navidad y Año Nuevo 2018

Parroquia San Andrés Apostol

Misas de Navidad y Año Nuevo 2018

Capilla La Milagrosa, Calle Norte 1,, Urb El Placer, Caracas. Tf: 0212-962.00.31

Domingo, 24 de Diciembre   7:00 p.m. MISA DE NOCHEBUENA
Lunes, 25 de Diciembre 12:00 m MISA DE LA SOLEMNIDAD DE LA NATIVIDAD DEL SEÑOR
Martes, 26 de Diciembre      6:00 p.m. MISA DE LA FIESTA DE SAN ESTEBAN, PROTOMÁRTIR
Miercoles, 27 de Diciembre    6:00 p.m. MISA DE LA FIESTA DE SAN JUAN, APÓSTOL Y EVANGELISTA
Jueves, 28 de Diciembre 6:00 p.m. MISA DE LA FIESTA DE LOS SANTOS INOCENTES
Viernes, 29 de Diciembre      6:00 p.m MISA DE LA V FERIA DE LA OCTAVA DE NAVIDAD
Sábad0, 30 de Diciembre      6:00 p.m. MISA DE LA FIESTA DE LA SAGRADA FAMILIA DE JESÚS,MARÍA Y JOSÉ
Domingo, 31 de Diciembre   5:00 p.m

6:00 p.m.

HORA SANTA

MISA DE LA SOLEMNIDAD DE SANTA MARÍA,MADRE DE DIOS

Domingo, 31 de Diciembre      12:00 m. MISA DE LA SOLEMNIDAD DE SANTA MARÍA,MADRE DE DIOS
Domingo, 1º de Enero 12:00 m. MISA DE LA SOLEMNIDAD DE SANTA MARÍA,MADRE DE DIOS

Cantaremos – II Domingo de Adviento /B

Los primeros creyentes han visto en Jesús, antes que nada, una buena noticia. Pero, ¿qué ha anunciado y ofrecido Jesús, que todavía no es conocido por los hombres aunque éstos lo esperan y lo buscan? Este es el anuncio de Jesús: La humanidad no camina sola, abandonada a sus propios recursos. Hay Alguien empeñado en la felicidad última del hombre. En el fondo de la vida hay Alguien que es bondad, acogida, liberación, plenitud: Dios, nuestro Padre. Esto lo cambia todo. No hay acceso a Dios nuestro Padre, sin búsqueda dolorosa del reino de la fraternidad. Así caen por tierra los falsos ídolos de un Dios presentado como indiferente y pasivo ante la injusticia humana. Pero no hay reino posible sino en Dios Padre, porque, en última instancia, el hombre no puede darse a sí mismo la salvación que anda buscando.

CANTAREMOS :

      • Ven Salvador ……………………………..…… 215
      • Preparad el camino al Señor ……………. 139
      • Adviento, Ven Salvador …………………… 227
      • Como el rocío del cielo ……………………. 231
      • Oh Emmanuel del mundo ………….…….. 266
      • Ven, ven Señor no tardes ………………… 220

Evangelio: Marcos (1,1-8): El camino de Dios es el evangelio

III.1. Se inicia en todos los sentidos el evangelio de Marcos. Como prólogo sirve para marcar las diferencias y los vínculos con el AT. Para ello se ha valido de la figura de Juan Bautista, que es una figura señera del Adviento. Históricamente, sabemos que Juan el Bautista predicó la llegada de un tiempo decisivo, que él mismo no podía alcanzar a ver con toda su radicalidad; pero de la misma manera que el AT es la preparación del NT, Juan resume toda esta función. Marcos (quien sea esta figura del cristianismo primitivo) escribe una obra que llama “evangelio”, buena noticia, ¡toda una proeza!. Pero esa buena noticia está en contraste con muchas cosas del pasado, las mejores de las cuales las representa en este instante el profeta del desierto, Juan el Bautista.

III.2. El Bautista era un profeta apocalíptico, y en el texto se nos describe con los rasgos del gran profeta Elías (2 Re 1,8, Mal 3,23), por eso no podrá entender plenamente la grandeza del evangelio que viene, incluso después de haber bautizado a Jesús. Juan está en el desierto, y el desierto es sólo una etapa de la vida del pueblo; es un símbolo de retiro, de penitencia, de conversión. El desierto es lo que está antes de la “tierra prometida”, y así hay que interpretarlo como semiótica certera. Pero también es verdad que es un marco adecuado para anhelar y desear algo nuevo y radical. Eso le sucede a Juan: presiente que algo nuevo está llegando… para lo que pide conversión.

III.3. Pero la conversión cristiana, la que propondrá Jesús, debe llevar también el signo de la alegría. No obstante, los cristianos, cuando tuvieron que revisar la misma predicación de Juan el Bautista, supieron dotarla de los elementos teológicos que marcaban la diferencia entre lo que él hacía y lo que haría aquél al que no era capaz de desatar la sandalia de sus pies. El bautismo de Juan y el bautismo cristiano están diferenciados por el Espíritu; no se trata solamente de penitencia. Los que seguían a Juan debían renunciar a su pasado. Los que siguen a Jesús, además de eso, tendrán un “espíritu” nuevo. Por lo mismo, y aunque Juan representa lo mejor del AT, también la esperanza que mana del mismo queda alicorta con respecto a lo que Jesús ha traído al mundo.

Fray Miguel de Burgos Núñez
Maestro y Doctor en Teología. Licenciado en Sagrada Escritura

Lectura bíblica – Marcos (13,33-37): La Vigilancia, una llamada a la esperanza.

III.1. El evangelio de Marcos propio del Ciclo B que inauguramos con este Adviento, insiste en el tema de la carta de Pablo. El c. 13 de Marcos se conoce como el “discurso escatológico” porque se afrontan las cosas que se refieren al final de la vida y de los tiempos. Es un discurso que tiene muchos parecidos con la literatura del judaísmo de la época que estaba muy determinada para la irrupción del juicio de Dios para cambiar el rumbo de la historia. Los otros evangelistas lo tomarían de Marcos y lo acomodarían a sus propias ideas. En todo caso, este discurso no corresponde exactamente a la idea que Jesús de Nazaret tenía sobre el fin del mundo o sobre la consumación de la historia.

III.2. Es bastante aceptado que es un discurso elaborado posteriormente, en situaciones nuevas y de crisis, sobre una “tradición” de Jesús y también de algo sucedido en tiempo del emperador Calígula. Aquí, el evangelista, se vale de la parábola del portero que recibe poderes para vigilar la casa hasta que el dueño vuelva. Estamos ante el final del discurso, y se ve que es como una especie de consecuencia que saca, el redactor del evangelio, de la tradición que le ha llegado a raíz de los acontecimientos que han podido marcar la crisis de Calígula, un hombre que no era agraciado ni en el cuerpo ni en el espíritu, como cuenta de él Suetonio (Calig., L). Los judíos habían derribado un altar pagano en Yamnia, y el emperador mandó hacer en el templo de Jerusalén un altar a Zeus. Para los judíos y los judeo-cristianos supuso una crisis de resistencia como oprimidos frente al poder del mundo. En aquél entonces algunos judeo-cristianos no habían roto todavía con el judaísmo y con el templo. No pueden desear otra cosa que legitimar su anhelo religioso en aras de una visión apocalíptica de la historia: sobre todo, es necesaria la fidelidad a Dios antes que la lealtad a los poderes del mundo que oprimen.

III.3. En la historia de la humanidad siempre se repiten momentos de crisis; situaciones imposibles de dominar desde el punto de vista social y político, cuando no es una catástrofe natural. La interpretación religiosa de esos acontecimientos se presta a muchos matices y a veces a falsas promesas. El hecho de que no se pueda asegurar el día y la hora pone en evidencia a los grupos sectarios que se las pintan muy bien para atemorizar a personas abrumadas psicológicamente. El lenguaje apocalíptico, que no era lo propio de Jesús, se convierte para algunos en la panacea de la interpretación religiosa en los momentos de crisis y de identidad.

III.4. Hoy, sin embargo, debemos interpretar lo apocalíptico con sabiduría y en coherencia con la idea que Jesús tenía de Dios y de su acción salvadora de la humanidad. Se pide “vigilancia”. ¿Qué significa? Pues que vivamos en la luz, en las huellas del Dios vivo, en el ámbito del Dios de la encarnación como misterio de donación y entrega. Ese es el secreto de la vigilancia cristiana y no las matemáticas o la precisión informática de nuestro final. Esto último no merece la pena de ninguna manera. Pero vigilar, es tan importante como saber vivir con dignidad y con esperanza. Hablar de la “segunda” venida del Señor hoy no tendría mucho sentido si no la entendemos como un encuentro a nivel personal y de toda la humanidad con aquél que ha dado sentido a la historia; un encuentro y una consumación, porque este mundo creado por Dios y redimido por Jesucristo no se quedará en el vacío, ni presa de un tiempo eternizado. Dios, por Jesucristo, consumará la historia como Él sabe hacerlo y no como los Calígula de turno pretenden protagonizar. Es esto lo que hay que esperar, y el Adviento debe sacar en nosotros a flote esa esperanza cristiana: todo acabará bien, en las manos de Dios.

Fray Miguel de Burgos Núñez
Maestro y Doctor en Teología. Licenciado en Sagrada Escritura

Cantaremos – 19 de Noviembre . XXXIII Domingo del Tiempo Ordinario /A

La parábola de este domingo nos recuerda que es necesario hacer fructificar los talentos recibidos. Lo primero que hay que recordar es que el talento no se gana, no se merece. Simplemente se recibe. Es un don, es algo diferente, pero siempre un don.  Es justo pensar que en la vida cristiana el punto de partida no es de cero, ni es posible decir : “yo me he hecho a mí mismo” . El Señor nos entrega algo para que trabajemos. En la Parábola, los dos primeros han usado el talento, lo han trabajado, han tenido una visión correcta del don. El tercero no ha entendido nada. El don se ha convertido en motivo de miedo. La parábola nos dice que hay que trabajar, pero eso no basta. Hay que saber para qué y para quién. Los empleados tienen que responder ante su Señor y éste valorará el resultado de su gestión. El Señor es generoso, pero se muestra severo si hemos usado los talentos solo en beneficio propio. Todavía es más inflexible  frente a quien esconde el talento.

A todos Dios nos ha dado Talentos para que seamos capaces de servirnos unos a otros.  

CANTAREMOS:

      • Reunidos en el nombre del Señor ……………………………. 159
        • Ten piedad – Gloria
        • Aleluya – Antífona
      • Este pan y vino Señor …………………………………………………  91
      • Vaso nuevo ……………………………………………………………….. 221
      • Dame un nuevo corazón ……………………………………………   64
      • Si vienes conmigo …………………………………………………….. 179

19 de Noviembre – Comentario bíblico : Mateo (25,14-30): No «enterrar» el futuro.

III.1. El evangelio de Mateo (25,14-30) nos muestra, tal como lo ha entendido el evangelista, una parábola de “parusía” sobre la venida del Señor. Es la continuación inmediata del evangelio que se leía el domingo pasado y debemos entenderlo en el mismo contexto sobre las cosas que forman parte de la escatología cristiana. La parábola es un tanto conflictiva en los personajes y en la reacciones. Los dos primeros están contentos porque “han ganado”; el último, que es el que debe interesar (por eso de las narraciones de tres), ¿qué ha hecho? :“enterrar”.

III.2.Los hombres que han recibido los talentos deben prepararse para esa venida. Dos los han invertido y han recibido recompensa, pero el tercero los ha cegado y la reacción del señor es casi sanguinaria. El siervo último había recibido menos que los otros y obró así por miedo, según su propia justificación. ¿Cómo entendieron estas palabras los oyentes de Jesús? ¿Pensaron en los dirigentes judíos, en los saduceos, en los fariseos que no respondieron al proyecto que Dios les había confiado? ¿Qué sentido tiene esta parábola hoy para nosotros? Es claro que el señor de esta parábola no quiere que lo entierren, ni a él, ni lo que ha dado a los siervos. El siervo que “entierra” los talentos, pues, es el que interesa.

III.3. Parece que la recompensa divina, tal como la Iglesia primitiva pudo entender esta parábola, es injusta: al que tiene se le dará, y al que tiene poco se le quitará. Pero se le quitará si no ha dado de sí lo que tiene. Y es que no vale pensar que en el planteamiento de la salvación, que es el fondo de la cuestión, se tiene más o menos; se es rico o pobre; sino que la respuesta a la gracia es algo personal que no permite excusas. La diferencia de talentos no es una diferencia de oportunidades. Cada uno, desde lo que es, debe esperar la salvación como la mujer fuerte de los Proverbios que se ha leído en primer lugar. Tampoco el señor de la parábola es una imagen de Dios, ni de Cristo, porque Dios no es así con sus hijos y Cristo es el salvador de todos. Es una parábola, pues, sobre la espera y la esperanza de nuestra propia salvación. No basta asegurarse que Dios nos va a salvar; o aunque fuera suficiente: ¿es que no tiene sentido estar comprometido con ese proyecto? La salvación llega de verdad si la esperamos y si estamos abiertos a ella.

Fray Miguel de Burgos Núñez
Maestro y Doctor en Teología. Licenciado en Sagrada Escritura

Cantaremos – XXXII Domingo del Tiempo Ordinario, Jornada Mundial de los Pobres.

La parábola de las vírgenes nos habla de vigilancia, de espera, pero más que espera de algo, espera de Alguien. El esposo se retrasa. Como cristianos esperamos la vuelta del Señor, pero no sabemos la hora exacta de su vuelta . Puede ser antes de lo que uno espera o más tarde de que se cree. Jesús más que establecer un plazo, exhorta a la vigilancia. No podemos alegar no estar informados, sino la de no estar preparados. Jesús no dice : Estad tranquilos. Advierte: Velad. No os dejéis coger de improviso. La diferencia entre las vírgenes prudentes y las sensatas está en tener o no tener aceite suficiente para cubrir el retraso del esposo. Cuando se grita diciendo que llega el esposo, ya no hay tiempo. Demasiado tarde para las necias, había que haberlo pensado antes. La fidelidad no se improvisa. En la hora, siempre sorprendente del encuentro, cuenta lo que se tiene, lo que se es, no lo que se querría .. El pecado está en despreocuparse, en eludir la cuestión fundamental por estar sumergido en preocupaciones terrenas, porque el esposo puede retrasarse, pero no dice que ya no llegará.

CANTAREMOS:

      • Somos un pueblo que camina ………..……………………….. 174
      • Te ofrecemos Señor …………………….……………………….. 186
      • Por ti Señor ………………………………………………………….. 134
      • Tan cerca de mi ……………………………………………………. 193
      • Viva Cristo ……………………………………………………………. 218