Categoría: Evangelio

El evangelio dominical primordialmente.

3 de Julio. Domingo XIV del Tiempo Ordinario

Evangelio según San Mateo (Mt 11,25-30)

En aquel tiempo, Jesús exclamó: “¡Te doy gracias, Padre, Señor del cielo y de la tierra, porque has escondido estas cosas a los sabios y entendidos, y las has revelado a la gente sencilla! Gracias, Padre, porque así te ha parecido bien.

El Padre ha puesto todas las cosas en mis manos. Nadie conoce al Hijo sino el Padre, y nadie conoce al Padre sino el Hijo y aquel a quien el Hijo se lo quiere revelar.

Vengan a mí, todos los que están fatigados y agobiados por la carga, y yo los aliviaré. Tomen mi yugo sobre ustedes y aprendan de mí, que soy manso y humilde de corazón, y encontrarán descanso, porque mi yugo es suave y mi carga ligera”.

26 de Junio. Domingo, Santisimo Cuerpo y Sangre de Jesucristo.

Evangelio según San Juan ( Jn 6,51-58 )

En aquel tiempo, Jesús dijo a los judios: “Yo soy el pan vivo que ha bajado del cielo; el que coma de este pan vivirá para siempre. Y el pan que yo les voy a dar es mi carne para que el mundo tenga vida”.

Entonces los judios se pusieron a discutir entre sí: “¿Cómo puede este darnos a comer su carne?”

Jesús les dijo: “Yo les aseguro: Si no comen la carne del Hijo del hombre y no beben su sangre, no podrán tener vida en ustedes. El que come mi carne y bebe mi sangre, tiene vida eterna y yo lo resucitaré el último día.

Mi carne es verdadera comida y mi sangre es verdadera bebida. El que come mi carne y bebe mi sangre, permanece en mí y yo en él. Como el Padre, que me ha enviado, posee la vida y yo vivo por él, así también el que me come vivirá por mí.

Este es el pan que ha bajado del cielo; no es como el maná que comieron sus padres, pues murieron.

El que come de este pan vivirá para siempre”.

19 de Junio. Domingo de la Santísima Trinidad.

Evangelio según San Juan (Jn 3,16-18)

“Tanto amó Dios al mundo, que le entregó a su Hijo único, para que todo el que crea en él no perezca, sino que tenga vida eterna. Porque Dios, no envió a su Hijo para condenar al mundo, sino para que el mundo se salvara por él. El que cree en él no será condenado; pero el que no cree ya está condenado, por no haber creído en el Hijo único de Dios.”

20 de Junio. Lunes,Feria,XII Semana del tiempo Ordinario.

Evangelio según San Mateo (Mt 7,1-5)

En aquel tiempo Jesús dijo a sus discípulos: “No juzguen y no serán juzgados; porque así como juzguen los juzgarán y con la medida que midan los medirán.

¿Por qué miras la paja en el ojo de tu hermano y no te das cuenta de la viga que tienes en el tuyo? ¿Con qué cara le dices a tu hermano: “Déjame quitarte la paja que llevas en el ojo, cuando tu llevas una viga en el tuyo? ¡Hipócrita! Sácate primero la viga que tienes en el ojo, y luego podrás ver bien para sacarle a tu hermano la paja que lleva en el suyo”.

18 de Junio-Sábado, Feria o Memoria de Santa María en sábado.

Santo Evangelio según San Mateo (Mt 6,24-34)

En aquel tiempo, Jesús dijo a sus discipulos :”Nadie puede servir a dos amos, porque odiará a uno y amará al otro, o bien, obedecerá al primero y no hará caso al segundo.En resumen, no pueden ustedes servir a Dios y al dinero. Por eso, les digo que no se preocupen por su vida, pensando qué comerán o con qué se vestirán. ¿Acaso no vale más la vida que el alimento, y el cuerpo más que el vestido? miren las aves del cielo, que ni siembran, ni cosechan, ni guardan en graneros y, sin embargo, el Padre celestial las alimenta. ¿Acaso no valen ustedes más que ellas? Quién de ustedes, a fuerza de preocuparse, puede prolongar la vida siquiera un momento? ¿Y por qué se preocupan del vestido? Miren cómo crecen los lirios del campo, que no trabajan ni hila. Pues bien, yo les aseguro que ni Salomón, en el esplendor de su gloria, se vestía como uno de ellos. Y si Dios viste así a la hierba del campo, que hoy florece y mañana es echada al horno, ¿no hará mucho más por ustedes, hombres de poca fe? No se inquieten , pues, pensando : ¿Qué comeremos o qué beberemos o con qué nos vestiremos?Los que no conocen a Dios se desviven por todas estas cosas; pero el Padre celestial ya sabe que ustedes tienen necesidad de ellas. Por consiguiente, busquen primeromel Reino de Dios y su justicia, y todas esas cosas se les darán por añadidura. No se preocupen por el día de mañana, porque el día de mañana traerá ya sus propias preocupaciones. A cada día le bastan sus propios problemas”.