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Programa de misas y Año Nuevo 2019

Parroquia San Andrés Apóstol

Programa de misas de Navidad y Año nuevo 2019>

Misas de Aguinaldos

 

Sábado, 15 de Diciembre
6:00 p.m
Calle Loma Larga,  Urb. Los Guayabitos
Domingo, 16 de Diciembre
12:00.m
6:00 p.m.
Capilla La Milagrosa
MISA DEL III DOMINGO DE ADVIENTO
Calle Sur 1, Sede ASOPLACER,Urb. El Placer
MISA DEL III DOMINGO DE ADVIENTO
Lunes, 17 Diciembre
5:00 p.m.
Calle Sur 6, Qta. Caema,Urb. El Placer
Martes, 18 de Diciembre
4:00 p.m.
Calle Sur 3, Qta Alborada, Urb. El Placer
Miercoles,19 de Diciembre
5:00 p.m.
Calle Sta. Isabel con Calle San Antonio Qta. Punto Alto 14 Urb. Monte Elena
Jueves, 20 de Diciembre
5:00 p.m.
Calle La Neblina,Qta. Todos Los Santos Urb. Colinas de Caricar
Viernes, 21 de Diciembre
5:00 p.m.
Calle Sur 6, Qta. Lejanía, Urb. El Placer
Sábado, 22 de Diciembre
5:00 p.m
Capilla La Milagrosa
MISA DEL IV DOMINGO DE ADVIENTO
Domingo, 23 de Diciembre
12:00 m
Capilla La Milagrosa
MISA DEL IV DOMINGO DE ADVIENTO

Comentario Bíblico. 21 de Octubre, XXIX Domingo del Tiempo Ordinario.

III.1. El evangelio nos ofrece una escena llena de paradojas, en las que se ponen de manifiesto los intereses de sus discípulos y la verdadera meta de Jesús en su caminar hacia Jerusalén. Ha precedido a todo esto el tercer anuncio de la pasión (Mc 10,33). La intervención de los hijos del Zebedeo no estaría en sintonía con ese anuncio de la pasión. Es, pues, muy intencionado el redactor de Marcos al mostrar que el diálogo con los hijos del Zebedeo necesitaba poner un tercer anuncio. El texto tiene dos partes: la petición de los hijos del Zebedeo (vv.35-40) y la enseñanza a los Doce (vv. 42-45). Es un conjunto que ha podido componerse en torno al seguimiento y al poder. De la misma manera que antes se había reflexionado sobre el seguimiento y las riquezas (10,17ss), en el marco del “camino hacia Jerusalén”.

III.2. Pensaban los discípulos que iban a conseguir la grandeza y el poder, como le piden los hijos del Zebedeo: estar a su derecha y a su izquierda, ser ministros o algo así. Incluso están dispuestos, decían, a dar la vida por ello; la copa y el martirio es uno de los símbolos de aceptar la suerte y el sufrimiento y lo que haga falta. Es verdad que en el AT la “copa” también puede ser una participación en la alegría (cf Jr 25,15; 49,12; Sal 75,9; Is 51,17). Podemos imaginar que los hijos del Zebedeo estaban pensando en una copa o bautismo de gloria, más que de sufrimiento. Sin embargo la gloria de Jesús era la cruz, y es allí donde no estarán los discípulos en Jerusalén. Lo dejarán abandonado, y será crucificado en medio de dos bandidos (fueron éstos lo que tendrían el privilegio de estar a la derecha y la izquierda), como ignominia que confunde su causa con los intereses de este mundo. Esta es una lección inolvidable que pone de manifiesto que seguir a Jesús es una tarea inconmensurable.

III.3. Es verdad que los discípulos podrán rehacer su vida, cambiar de mentalidad para anunciar el evangelio, pero hasta ese momento, Jesús camina hacia Jerusalén con las ideas lúcidas del profeta que sabe que su causa pude ser confundida por los que le rodean y por los que se han convertido en contrarios a su mensaje del Reino. Los grandes tienen una patología clara: dominan, esclavizan, no dejan que madure nadie en la esencia ética y humana. Por el contrario, el Dios del Reino, trata a cada uno con amor y según lo que necesita. Ahí está la clave de lo que quiere llevar adelante Jesús como causa, aunque sea pasando por la cruz. Un Dios que sirve a los hombres no es apreciado ni tenido como tal por lo poderosos, pero para el mensaje del evangelio, ese Dios que sirve como si fuera el último de todos, merece ser tenido por el Dios de verdad. Es eso lo que encarna Jesús, el profeta de Nazaret.

III.4. Llama la atención el v. 45, “el dicho” sobre el rescate (lytron) por todos. Este dicho puede estar inspirado en Is 53,12. No se trata propiamente de sacrificio ni de expiación, porque Dios no necesita que alguien pague por los otros. No es propiamente hablando una idea de sustitución, aunque algunos insisten demasiado en ello. Es, en definitiva, una idea de solidaridad con la humanidad que no sabe encontrar a Dios. Y para ello Él debe pasar por la muerte. No porque Dios lo quiera, sino porque los poderosos de este mundo no le han permitido hacer las cosas según la voluntad de Dios. Pensar que Jesús venía a sufrir o quería sufrir sería una concepción del cristianismo fuera del ámbito y las claves de la misericordia divina. El Hijo del Hombre debe creer en el ser humano y vivir en solidaridad con él. El Cur Deus homo? (por qué Dios se hizo hombre) de Anselmo de Canterbury, debería haberse inspirado mejor en esta idea de la solidaridad divina con la humanidad que en la visión “jurídica” de una deuda y un pago, que sería imposible. Dios no cobra rescates con la vida de su Hijo, sino que lo ofrece como don gratuito de su amor.

Fray Miguel de Burgos NúñezFray Miguel de Burgos Núñez
Maestro y Doctor en Teología. Licenciado en Sagrada Escritura

Cantaremos – XIX Domingo del Tiempo Ordinario

En una realidad tan complicada como la nuestra, todo se tambalea y el sentimiento de seguridad sacude hasta nuestra misma fe. Entonces hay que comenzar por el principio: la fe no es seguridad, sino coraje y riesgo. Los discípulos vieron al Señor caminando sobre las aguas,… lo cual significa significa que El había vencido el poder de las fuerzas naturales, el miedo a la destrucción y a la muerte que amenaza nuestra existencia. Por la fe en  el Señor, viven sus discípulos….y también por la fe Pedro aprende a caminar sobre las aguas….. Es posible que también nosotros podamos mantenernos en pie sobre un mar de dudas, si abandonamos la orilla o la barca de nuestras falsas seguridades para responder al llamado del Señor.

 

¡Qué audacia la del deseo de Pedro! Su imprudencia le habría acarreado la muerte si lo que se veía hubiese sido realmente un fantasma!….. Sus palabras revelan una fe vigorosa, puesto que Pedro cree verdaderamente en El….y expresan también una voluntad firme de querer estar con Cristo, con lo cual deja al descubierto uno de los rasgos más profundos de la fisonomía del apóstol. No sólo de aquellos discípulos, sino de los de hoy también.

 

Jesús le llama y Pedro sale de la barca, pone su pie sobre el agua y ésta le lleva efectivamente.  Creer es participar en el Ser mismo de Jesús, en lo que Él es. Este pasaje evangélico nos muestra una de las experiencias  más  importantes sobre la naturaleza de la fe.  La fe no se debe únicamente al desarrollo de la razón,  como tampoco depende de la sola voluntad. Lo decisivo, lo que se impone realmente a la conciencia del creyente no es “ni una verdad”, ni “un valor”, sino una realidad, la del Dios Santo y vivo revelado en Jesucristo. -En el centro de todo lo que el hombre puede pensar y experimentar, en medio de lo que llamamos “mundo” existe una realidad  sobre la que nos podemos apoyar, un Amor al que nos podemos confiar. Tener fe significa captar esta realidad.

CANTAREMOS :

  • El Señor es mi fuerza
  • Este es el momento
  • Quién es ese
  • Somos un pueblo que camina
  • Viva Cristo

 

Julie Meucci

13 de agosto – XIX Domingo del Tiempo Ordinario /A

Evangelio según san Mateo (Mt 14, 22-33)

En aquel tiempo, inmediatamente después de la multiplicación de los panes, Jesús hizo que sus discípulos subieran a la barca y se dirigieran a la otra orilla, mientras él despedía a la gente. Después de despedirla, subió al monte a solas para orar. Llegada la noche, estaba él solo allí.

Entretanto, la barca iba ya muy lejos de la costa, y las olas la sacudían, porque el viento era contrario. A la madrugada, Jesús fue hacia ellos, caminando sobre el agua. Los discípulos, al verlo andar sobre el agua, se espantaron, y decían: “¡Es un fantasma!” Y daban gritos de terror. Pero Jesús les dijo enseguida: “Tranquilícense y no teman. Soy yo”.

Entonces le dijo Pedro: “Señor, si eres tú, mándame ir a ti caminando sobre el agua”. Jesús le contestó: “Ven”. Pedro bajó de la barca y comenzó a caminar sobre el agua hacia Jesús; pero al sentir la fuerza del viento, le entró miedo, comenzó a hundirse y gritó: “¡Sálvame, Señor!” Inmediatamente Jesús le tendió la mano, lo sostuvo y le dijo: “Hombre de poca fe, ¿por qué dudaste?”

En cuanto subieron a la barca, el viento se calmó. Los que estaban en la barca se postraron ante Jesús diciendo: “Verdaderamente tú eres el Hijo de Dios”.

 

Los sacerdotes también lloran.

¿Los sacerdotes también lloran?

Foto de Jorge Enrique Mújica LC.Yo no aguanté y lloré ayer. Iba a cenar cuando sonó el timbre de casa. Buscaban un sacerdote para dar la unción de los enfermos a una moribunda. Pedí permiso a mi superior, tomé el óleo santo, el ritual de los sacramentos, la estola morada y me subí a un coche desconocido que me llevó a un hospital público cercano.

Si alguien hubiera aparecido en aquel lugar sin saber dónde se encontraba hubiera supuesto que se trataba de un mercado. Pero no, era un hospital público con hacinamiento donde las personas –desgraciadamente– no siempre son tratadas con la dignidad que merecen.

Subí el ascensor, recorrí unos pasillos y llegue a la habitación (donde había otros tres internados). En la cama se encontraba una mujer agonizante que estaba perdiendo la batalla contra el cáncer de hígado y páncreas. En los pasillos aguardaba la familia de Laura: el papá, el esposo y sus tres jóvenes hijos (el más pequeño de apenas tres años).

Traté de consolarla, darle el cariño con que Dios se disponía a recibirla pero ya estaba inconsciente. Entonces me preparé para administrar el sacramento de la unción y pedí al esposo de la moribunda que me ayudará como «acólito». Se me cortó la voz varias veces y la fuga de lágrimas fue una constante durante casi todo el rito. Al final pedí a los familiares que salieran de la habitación y di la absolución que se da a los que se confiesan. Si Laura moría en unas horas iría derechito con Dios.

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Se robaron hostia consagrada de la Iglesia Cristo Rey en Táchira

Como “sacrilegio” calificó el padre José Laureano Ballesteros el robo de una hostia consagrada durante la madrugada del lunes en la Iglesia Cristo Rey, en Las Lomas, San Cristóbal, estado Táchira.
El párroco explicó que “al robar el estuche metálico que contiene una hostia consagrada, se ha cometido sacrilegio, porque se ha tomado en las manos algo que es exclusivo para la adoración por parte de la comunidad”.
El sacerdote llama a la reflexión de quienes cometieron el hecho, el cual conmovió profundamente a la feligresía tachirense. Al respecto, dijo que “esta nota la hacemos más que todo para que devuelvan el estuche metálico, el cual no tiene mayor valor económico”.
“Su valor –destacó- es espiritual, ya que es una hostia consagrada; y quien utiliza esto está cometiendo una falta muy grave y se está exponiendo a un castigo de Dios, quien castiga a los que comenten esta clase de pecados tan graves como es robar una hostia consagrada”.
Sostuvo, además, “no la van a poder vender y que no se utiliza más sino para la adoración, para la alabanza, para la súplica y para pedir perdón. Entonces, a la persona que haya hecho esto, le pedimos que devuelva a la Iglesia de Cristo Rey en Las Lomas el estuche metálico con la hostia consagrada”.
Con información de Globovisión

Cantaremos. Festividad de Corpus Christi.

FESTIVIDAD  DEL  CORPUS  CHRISTI

Benedicto XVI,  dice:   " en la fiesta del Corpus, la Iglesia revive el misterio del Jueves Santo a la luz de la Resurrección. También en el Jueves Santo hay una procesión eucarística, con la que la Iglesia repite el éxodo de Jesús del Cenáculo al Monte de los Olivos.   Jesús entrega su cuerpo y su sangre. Atravesando el umbral de la muerte, se convierte en Pan vivo, auténtico maná, alimento inagotable por todos los siglos".

En la Eucaristía el Señor se encuentra siempre en camino hacia el mundo. Este aspecto universal de la presencia eucarística está presente en la procesión de nuestra fiesta. Llevamos a Cristo, presente en la figura del pan, por las calles de nuestra ciudad. Encomendemos estas calles, estas casas, nuestra vida cotidiana, a su bondad. 
Nuestras celebraciones eucarísticas debieran ser lo que quiso el Concilio: "Centro y cumbre de nuestra vida cristiana  La Cena del Señor es demasiado importante para que asistamos como “ simples espectadores de una celebración"  y salgamos sin habernos calentado el corazón, sin dinamismo para trasformar nuestro diario vivir en auténtica  vida cristiana.

Ojalá que comencemos hoy  a vivir nuestra Misa como una celebración gozosa que nos haga crecer como comunidad fraterna, al tiempo que reviva en nosotros la esperanza en Cristo Jesús.

CANTAREMOS:

      • El Señor nos llama y nos reúne………………………………………..272
        • Piedad-Señor ten piedad-Gloria
        • Aleluya-Antífona
      • Este pan y vino……………………………………………………………….91
        • Santo-Padre nuestro-La paz
        • Cordero de Dios
      • Pascua, canto comunión…………………………………….…………..133
      • Tan cerca de mi…………………………………………………………….193
      • Cantemos al amor de los amores…………..………………………….49
      • Tu reinaras……………………………………………………………………184

8 de Junio–Domingo de Pentecostés, S

Evangelio según san Juan (Jn 20,19-23)

Al anochecer del día de la resurrección, estando cerradas las puertas de la casa donde se hallaban los discípulos, por miedo a los judíos, se presentó Jesús en medio de ellos y les dijo: “La paz esté con ustedes”. Dicho esto, les mostró las manos y el costado.

Cuando los discípulos vieron al Señor, se llenaron de alegría. De nuevo les dijo Jesús: “La paz esté con ustedes. Como el Padre me ha enviado, así también los envío yo”. Después de decir esto, sopló sobre ellos y les dijo: “Reciban al Espíritu Santo. A los que les perdonen los pecados, les quedarán perdonados; y a los que no se los perdonen, les quedarán sin perdonar”.

11 de Mayo. IV Domingo de Pascua /A

Evangelio según San Juan (Jn 10,1-10)

En aquel tiempo, Jesús dijo a los fariseos: “ Yo les aseguro que el que no entra por la puerta del redil de las ovejas, sino que salta por el otro lado, es un ladrón, un bandido; pero el que entra por la puerta, ése es el pastor de las ovejas. A ése le abre el que cuida la puerta, y las ovejas reconocen su voz; él llama a cada una por su nombre y las conduce afuera. Y cuando ha sacado a todas sus ovejas, camina delante de ellas, y ellas lo siguen, porque conocen su voz. Pero a un extraño no lo seguirán, sino que huirán de él, porque no conocen la voz de los extraños”.

Jesús les puso esta comparación, pero ellos no entendieron lo que les quería decir. Por eso añadió: “Les aseguro que yo soy la puerta de las ovejas. Todos los que han venido antes que yo, son ladrones y bandidos; pero mis ovejas no los han escuchado.

Yo soy la puerta; quien entre por mí se salvará, podrá entrar y salir, y encontrará pastos. El ladrón sólo viene a robar, a mater y a destruir. Yo he venido para que tengan vida y la tengan en abundancia”.